Uveitis grave en paacientes de enfermedad de Behcet
La enfermedad de Behçet es una patología crónica y multisistémica de origen autoinmune, caracterizada por la inflamación de los vasos sanguíneos (vasculitis) en diversas partes del cuerpo. Aunque la causa exacta es desconocida, se cree que está relacionada con una respuesta anormal del sistema inmunológico en personas genéticamente predispuestas. Esta enfermedad puede afectar tanto a los vasos sanguíneos pequeños como grandes y tiene un curso clínico muy variable, con brotes y remisiones.
Los principales síntomas de la enfermedad de Behçet incluyen:
- Úlceras bucales recurrentes: Son una de las manifestaciones más comunes y pueden ser dolorosas.
- Úlceras genitales: Similar a las de la boca, pero afectan los genitales, tanto en hombres como en mujeres.
- Lesiones cutáneas: Como erupciones, pústulas o nódulos dolorosos (eritema nodoso).
- Inflamación ocular (uveítis): Puede afectar la visión y causar enrojecimiento, dolor y sensibilidad a la luz.
- Problemas articulares: Dolor e inflamación de las articulaciones, similar a la artritis.
- Afectación neurológica: En algunos casos, puede causar síntomas neurológicos como cefaleas, confusión o problemas motores.
- Problemas gastrointestinales: Pueden presentarse úlceras en el tracto digestivo.
La enfermedad también puede afectar otros sistemas, como los pulmones y los riñones, aunque esto es menos frecuente.
El diagnóstico se basa principalmente en los síntomas clínicos, ya que no existe una prueba específica para la enfermedad de Behçet. El tratamiento varía según los órganos afectados y puede incluir medicamentos antiinflamatorios, corticosteroides, inmunosupresores y, en casos graves, biológicos (como los inhibidores del factor de necrosis tumoral).
Es más común en ciertas regiones del mundo, como el Mediterráneo, Oriente Medio y Asia, aunque puede ocurrir en cualquier parte del mundo.
La uveitis
La uveítis es una inflamación de la úvea, la capa intermedia del ojo que incluye el iris, el cuerpo ciliar y la coroides. La úvea contiene muchos de los vasos sanguíneos que nutren el ojo, por lo que su inflamación puede afectar diversas partes del mismo, incluyendo la córnea, el humor vítreo, la retina y el nervio óptico.
La uveítis puede ser causada por infecciones, trastornos autoinmunes o enfermedades sistémicas, aunque en muchos casos la causa es idiopática (desconocida). Sus principales síntomas incluyen:
Enrojecimiento del ojo
- Dolor ocular
- Visión borrosa
- Sensibilidad a la luz (fotofobia)
- Lagrimeo excesivo
La uveítis se clasifica en función de la parte del ojo afectada:
- Uveítis anterior: Afecta principalmente el iris y el cuerpo ciliar, es la forma más común.
- Uveítis intermedia: Inflama principalmente la parte media del ojo, como el humor vítreo.
- Uveítis posterior: Afecta la coroides y la retina.
- Panuveítis: Afecta todas las capas de la úvea.
